WASHINGTON. – El presidente Donald Trump se encontraba reunido con la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, en la Casa Blanca cuando reaccionó al tiroteo ocurrido el jueves en la Universidad Estatal de Florida (FSU).
Agentes especiales del FBI estaban en el campus de Tallahassee investigando el ataque, que dejó dos muertos, seis heridos y un sospechoso de 20 años lesionado durante su arresto.
“Es una vergüenza, algo horrible”, dijo Trump desde la Oficina Oval.
Cuando un reportero le preguntó sobre una posible legislación para el control de armas, Trump reiteró su apoyo a la Segunda Enmienda de la Constitución de EE.UU., que garantiza el derecho a portar armas.
“Las armas no disparan solas, son las personas las que lo hacen”, afirmó.
El gobernador Ron DeSantis publicó un video mostrando su solidaridad con la comunidad universitaria de FSU. El Departamento de Cumplimiento de la Ley de Florida (FDLE) y la Patrulla de Caminos de Florida también respondieron al llamado en el campus.
DeSantis elogió la actuación de la policía de FSU, del Departamento de Policía de Tallahassee y de la Oficina del Sheriff del condado de Leon —la agencia para la cual trabaja la madre del sospechoso como agente.
“Este asesino debe —y será— llevado ante la justicia con todo el peso de la ley”, declaró DeSantis, refiriéndose al papel de la Fiscalía Estatal del condado de Leon.
La fiscal general de EE.UU., Pam Bondi, informó que los fiscales federales estaban en comunicación con los agentes del FBI desplegados en el lugar.
Tanto legisladores republicanos como demócratas emitieron comunicados la noche del jueves en reacción al ataque.
El congresista Neal Dunn, médico y veterano del Ejército que representa al distrito donde se ubica FSU, declaró sentirse devastado:
“Mi corazón está con las víctimas de esta tragedia inconcebible y con sus familias”, escribió Dunn.
Los representantes Jimmy Patronis, Byron Donalds, Lois Frankel, Jared Moskowitz, y los senadores Rick Scott y Ashley Moody se unieron a DeSantis en ofrecer mensajes de oración y apoyo tras el tiroteo.
“Gracias a las fuerzas del orden por actuar con rapidez y decisión para neutralizar al atacante de hoy. Que Dios bendiga la memoria de los fallecidos y a sus familias”, escribió Donalds.
La congresista Lois Frankel, demócrata, también agradeció a los socorristas que actuaron para proteger a estudiantes, profesores y personal de la universidad.
“Estoy pensando en los heridos y sus familias”, expresó Frankel.
Jared Moskowitz agregó:
“Los estudiantes deberían poder asistir a la escuela sin el temor constante a la violencia armada”.
El representante estatal Daniel Pérez, presidente de la Cámara de Representantes de Florida, calificó la situación como “aterradora y la peor pesadilla de cualquier padre”, e instó a “todos a orar por los estudiantes, familias, docentes, socorristas y todos los involucrados”.
Por su parte, el presidente del Senado estatal, Ben Albritton, expresó:
“Desde nuestro lugar en el Senado podíamos ver y oír numerosos vehículos de emergencia dirigiéndose a FSU. Agradecido por su valentía. Rezamos por toda la comunidad de FSU”.
