La Fundación Hope Florida, una organización benéfica privada vinculada a la primera dama Casey DeSantis, celebró el jueves una reunión de su consejo con el objetivo de recuperar la confianza pública ante el creciente cuestionamiento sobre sus finanzas y su relación con el gobierno estatal.
Sin embargo, la reunión fue abruptamente interrumpida por piratas informáticos que inundaron la transmisión en video con imágenes pornográficas, símbolos racistas y lenguaje vulgar, intensificando aún más las críticas hacia una fundación que ya estaba bajo fuego por su manejo de fondos públicos.
“Declaro abierta esta sesión del consejo de la Fundación Hope Florida”, dijo Joshua Hay, presidente de la organización.
La reunión apenas había comenzado cuando ocurrió la interrupción.
“Lamento interrumpir, pero hay algo—”, alcanzó a decir un miembro del consejo antes de ser silenciado.
La transmisión fue tomada repentinamente por los hackers, quienes mostraron pornografía, símbolos racistas y audios ofensivos, incluyendo frases como “slam dunk a baby into the trash can” (“clava a un bebé en el bote de basura”).
El video fue cortado abruptamente y la reunión quedó suspendida temporalmente.
Este impactante incidente marcó un caótico regreso de la fundación, que ha sido duramente cuestionada por haber recibido 10 millones de dólares de fondos públicos, a pesar de ser una entidad privada.
Los críticos no tardaron en señalar que el hackeo demuestra la falta de controles operativos y medidas básicas de ciberseguridad.
Esta misma semana, la fundación fue objeto de una audiencia en el Comité de la Cámara de Representantes de Florida, donde los legisladores cuestionaron con dureza la falta de transparencia.
“No puedo confirmar en qué se usaron los fondos”, reconoció una representante.“No, no tenemos procedimientos de monitoreo. No tenemos personal.”
Los legisladores también expresaron preocupación por la posibilidad de que los fondos públicos hayan sido utilizados con fines políticos para apoyar al gobernador Ron DeSantis.
“Por lo que he podido ver, el 80% de todos los fondos que la fundación ha recibido o distribuido terminaron en comités políticos o se usaron para fines políticos”, dijo el representante Andrade.
A pesar del incidente, la reunión fue reanudada más tarde ese mismo día. Funcionarios de la fundación presentaron declaraciones de impuestos reconstruidas y registros bancarios que no habían sido revelados previamente.
Sin embargo, muchas preguntas siguen sin respuesta, incluyendo quién aprueba la distribución de los recursos de la Fundación Hope Florida.
El Comité de la Cámara de Florida continuará con la investigación la próxima semana. Los legisladores han ordenado que la fundación entregue registros, documentos financieros y comunicaciones entre su liderazgo y el equipo del gobernador, así como con cualquier operador político externo.