MIAMI, Fla. – El impulso del gobierno federal para eliminar los programas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI, por sus siglas en inglés) también ha impactado al sector privado, con muchas grandes empresas retirando fondos de causas LGBTQ.
En un panorama político incierto, podría parecer arriesgado para un negocio apoyar públicamente iniciativas que desafían la corriente predominante. Sin embargo, un número creciente de pequeños empresarios en Miami está dispuesto a asumir ese riesgo.
Julie Frances, propietaria de Easy Peasy, es una de ellas. “Ser valiente significa actuar incluso cuando no es fácil”, dijo, mientras ofrece certificados de regalo como parte de una recaudación de fondos para una causa que algunos consideran controversial.
La iniciativa, liderada por Miranda De Gasperi, de la organización sin fines de lucro Buen Provecho Collective, y Emery Morales, de Walls Down, busca financiar atención médica de afirmación de género para personas trans y no binarias en la comunidad de Miami.
Para Morales, quien es trans, este esfuerzo es profundamente personal. “La gente tiene muchas ideas sobre lo que somos o no somos. Pero yo lloro como tú lloras, sufro como tú sufres, tengo familia”, expresó con emoción.
Pese a la creciente polarización sobre los derechos trans en Florida y el país, la respuesta ha sido sorprendentemente positiva. “Honestamente, ha sido increíble”, dijo De Gasperi.
Mientras las grandes empresas retiran su apoyo a iniciativas de diversidad, pequeños empresarios están asumiendo la causa, convencidos de que los valores correctos atraerán a la clientela adecuada.
“Si sigues lo que dicta tu corazón y lo que crees que es moralmente correcto, tu negocio estará bien, y las personas indicadas te encontrarán”, afirmó Frances.
A pesar del riesgo de recibir críticas, estos empresarios esperan que más personas se unan a su esfuerzo.