MIAMI, Fla. – La controversia sigue aumentando en torno a una propuesta de ordenanza que la ciudad de Miami está considerando, la cual modificaría el trámite municipal sobre la remoción de árboles.
El comisionado que impulsa la medida afirma que es necesaria para simplificar el proceso de permisos para todos los residentes, pero los opositores temen que beneficie a los desarrolladores y reduzca el actual dosel arbóreo.
El martes, en una reunión pública en el Ayuntamiento de Miami, las pasiones se desbordaron mientras los residentes y ambientalistas expresaban su preocupación de que la nueva ordenanza facilite la tala de árboles.
”Lo que me preocupa de esta ordenanza es que disminuirá significativamente nuestro vital dosel arbóreo porque permite a los propietarios eliminar árboles no nativos o que no son adecuados para Florida sin necesidad de un permiso”, dijo Sandy Moise, directora de políticas de Urban Paradise Guild.
Sin embargo, el comisionado Miguel Ángel Gabela, patrocinador de la ordenanza, argumentó que los cambios son necesarios porque el código actual hace que el proceso de permisos sea complicado y costoso, especialmente para residentes de bajos ingresos.
”Las personas en mi distrito tienen dificultades para navegar el sistema de permisos de la ciudad de Miami”, dijo Gabela. “Algunos residentes no tienen los recursos que otros distritos tienen y, por lo tanto, carecen de representación”.
Ambientalistas como el representante del Sierra Club y ex comisionado de la ciudad, Ken Russell, rechazaron la medida, afirmando que el problema no radica en la ordenanza actual, sino en el proceso administrativo.
”Si es difícil obtener un permiso, no es un problema legislativo, sino administrativo. No necesitamos cambiar el código; solo necesitamos que la oficina del administrador de la ciudad haga su trabajo”, dijo Russell.
El proceso actual para obtener permisos está lleno de burocracia, puede tardar meses y ser costoso. Aunque los funcionarios buscan hacer el sistema más equitativo, los ambientalistas advierten que la propuesta tiene vacíos legales que beneficiarían tanto a los residentes como a los desarrolladores.
La ciudad de Miami tiene un dosel arbóreo que cubre solo el 18%, muy por debajo del objetivo del 30% y del promedio de otras ciudades estadounidenses.
”Los árboles son nuestra primera línea de defensa contra los efectos del cambio climático, como las inundaciones, el aumento del nivel del mar y el calor extremo”, explicó Chris Baraloto, profesor de Ciencias Biológicas en la Universidad Internacional de Florida. Según estudios, los árboles pueden reducir la temperatura entre 7 y 11 grados en áreas urbanas.
Gabela aseguró que si la ordenanza resultara perjudicial, estaría dispuesto a retirarla. “Ya dije que la voy a aplazar porque quiero dar a todos la oportunidad de expresar sus inquietudes y llegar a una conclusión”, afirmó.
Por su parte, Russell pidió retirar la ordenanza por completo y corregir los problemas identificados.
La votación originalmente programada para el 23 de enero ha sido pospuesta, y no hay una fecha definida para que el tema sea retomado por la comisión. Mientras tanto, correos electrónicos entre representantes de la Asociación de Constructores del Sur de Florida y la oficina de Gabela, aunque levantaron sospechas, han sido negados como actos impropios o de colusión.