MIAMI BEACH, Fla. – La Academia Hebrea de Miami Beach realizó una solemne ceremonia el lunes por la mañana, conmemorando el primer aniversario de los ataques de Hamas a Israel del 7 de octubre.
La escuela privada reunió a estudiantes y personal para un evento especial de remembranza en el gimnasio, reflexionando sobre la devastación y la pérdida.
“Entrar al gimnasio y ver a toda la gente y a los rehenes, desafortunadamente, definitivamente me hizo sentir por todos”, dijo Julian Horovits, estudiante de tercer año de la Academia Hebrea.
La ceremonia incluyó sillas vacías, cada una marcada con la foto de uno de los israelíes tomados como rehenes por Hamas durante el ataque. Algunas de las fotos fueron colocadas en sillas altas, simbolizando a los niños entre los rehenes.
“Es emotivo, es triste. Es algo que ni siquiera puedes explicar con palabras”, agregó Daniel Shabi, estudiante de segundo año.
Horovits, quien estaba en Tel Aviv cuando ocurrió el ataque, compartió su angustiosa experiencia. Recordó despertar con sirenas y el caos de ese día.
“La parte más aterradora para mí personalmente fue que no sabíamos si había terroristas en Tel Aviv, que es donde me estaba quedando”, dijo. Horovits logró abordar uno de los últimos vuelos que salieron de Israel, presenciando cómo interceptaban cohetes mientras su avión despegaba.
Para Shabi, los ataques golpearon aún más cerca de casa. Su tío, Luftan, asistía al Festival de Música Nova, uno de los primeros sitios atacados por los militantes de Hamas.
“Mi hermano pequeño me dijo: ‘Tu tío Luftan está en el festival’, y yo pensé: ‘¿Qué? No puede ser’”. La familia de Shabi pasó una semana y media buscando a su tío antes de que encontraran su cuerpo. “Es como tomar un pedazo de nuestro corazón y simplemente romperlo”, dijo Shabi.
Los estudiantes también recorrieron una exhibición montada por los estudiantes de último año de la escuela, que proporcionaba información sobre los eventos de ese día y los túneles bajo Gaza donde se mantuvo a muchos rehenes.
“Definitivamente es algo triste, pero estamos orando todos los días, deseando que puedan volver a casa y que todos estén a salvo, y eso es todo lo que podemos hacer”, concluyó Horovits.
La ceremonia sirvió como un duro recordatorio de la guerra en curso y las muchas vidas que aún se ven afectadas.