MIAMI, Fla. – Fiscales federales en Miami están manejando casos que involucran a una docena de sospechosos, incluidos miembros de la mafia mexicana y de las pandillas MS-13 y Sur-13, por el tráfico de drogas sintéticas altamente adictivas en el sur de Florida.
Los registros muestran que los investigadores acusaron a Edgar “Diablo” García-Velasquez, nacido en Honduras, de posesión con intención de distribuir una mezcla que contenía fentanilo y aproximadamente 50 gramos de metanfetamina en los condados de Broward y Miami-Dade.
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Según una acusación formal, García-Velasquez, de 34 años, no trabajaba solo. Investigadores federales y locales de varias agencias trabajaron juntos para identificar a otros 11 co-conspiradores, incluidos siete de Florida y cuatro de California.
Los acusados en Florida son José “LaBomba3″ Hernández, Loupe “L3g3nd” Loredo, Hugo “Houdini” Cruz, Luis “Sombra” Portillo, Rafael “Rafy” Gutiérrez, Malinda Martínez y Karina Martínez-Vázquez, quienes proceden de cinco condados: Miami-Dade, Palm Beach, Lee, Polk y Hendry.
Los cuatro de California son Francisco “Casper” Rangel, José “Stranger″ Puga, Felipe “Wicked” González y Gabriela Rodríguez-Carrillo.
Un trío: Martínez-Vázquez, de 34 años, del condado de Miami-Dade; Rodríguez-Carrillo, de 42 años; y Puga, de 45 años, supuestamente trabajaba tanto con la metanfetamina como con la mezcla que contenía fentanilo.
Gutiérrez, de 28 años, del condado de Miami-Dade, supuestamente ayudó al trío con la metanfetamina. Portillo, también conocido como “Shadow”, de 35 años, y Gutiérrez, de 28 años, ambos del condado de Miami-Dade, asistieron con la ayuda de Martínez, de 42 años, de Fort Myers en el condado de Lee, y de Loredo, de 39 años, de Lake Wales en el condado de Polk.
Los fiscales anunciaron el viernes que los arrestos de los 12 acusados comenzaron el 12 de septiembre. La investigación involucró a agentes de la Administración para el Control de Drogas en Miami; agentes del FBI en Miami, Los Ángeles y Fort Myers; y agentes de Investigaciones de Seguridad Nacional en Fort Lauderdale, Fort Myers y Los Ángeles.
La Oficina del Sheriff de Broward, y agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos en Miami y Fort Lauderdale, también trabajaron en los casos. La fiscal federal adjunta Bertila Fernández está a cargo de los casos.