SPRINGFIELD, Ohio – Líderes en Springfield, Ohio, están reaccionando a las afirmaciones falsas de Donald Trump sobre inmigrantes haitianos comiendo mascotas.
Durante el debate presidencial del martes por la noche entre Trump y la vicepresidenta Kamala Harris, el moderador hizo preguntas sobre la protección fronteriza. Parte de la respuesta de Trump se centró en los inmigrantes y las mascotas familiares.
“En Springfield, están comiendo los perros, están comiendo los gatos, están comiendo las mascotas de las personas que viven allí”, afirmó Trump.
Estas declaraciones amplifican los falsos rumores virales que afirman que inmigrantes haitianos robaban y comían las mascotas de las personas. Funcionarios de la ciudad dijeron a ABC News que “no hay reportes creíbles ni denuncias específicas de mascotas que hayan sido dañadas, heridas o abusadas por miembros de la comunidad inmigrante”.
Las reacciones se han propagado por todo el país en diversas plataformas.
“Estar en un cargo de liderazgo en este momento es como jugar a golpear al topo, donde saltamos para extinguir un mito a la vez”, dijo la comisionada del condado de Clark, Ohio, Melanie Flax Wilt.
Desde Springfield, Ohio, donde supuestamente ocurrieron los crímenes falsos, hasta la televisión nacional, como el programa The View.
“Como esposa de un haitiano y madre de hijos haitianos, ¿cómo se atreve?”, dijo Sunny Hostin, co-presentadora de The View.
Gepsie Metellus, directora ejecutiva de Sant La, un centro de defensa y apoyo comunitario haitiano en el norte de Miami, también expresó su indignación.
“Eso no solo es una bofetada al legado que compartimos como estadounidenses, sino que es un golpe bajo, una bajeza y, por cierto, eso no forma parte de la cocina haitiana, por favor”, dijo.
Metellus recordó cuando el expresidente preguntó en 2018: “¿Por qué tenemos a toda esta gente de países de m--- aquí?”, refiriéndose a los inmigrantes africanos y haitianos.
La Fundación Haitiana Americana por la Democracia afirma que ciudades como Springfield, cuya economía estaba en declive, han sido revitalizadas por inmigrantes.
Los recientes ataques han sido calificados como un vil intento de sembrar el miedo por parte de los afectados.
“Que no tengan nada que ofrecer al pueblo estadounidense más que este discurso barato, deshumanizante, racista, antiinmigrante y antiinmigrante negro... si esto es todo lo que tienen, me da pena por ellos”, dijo Metellus.