PORT-AU-PRINCE, Haití. – Durante una visita al Palacio Nacional de Haití esta semana, Local 10 News fue testigo de un cambio significativo en la nación caribeña: la reaparición de su ejército, marcando la primera vez desde la década de 1990 que Haití cuenta con una fuerza militar.
El ejército es parte de una misión más amplia encabezada por el recién nombrado primer ministro Garry Conille, quien está decidido a desmantelar las pandillas que, según él, controlan más del 80% de la capital, Puerto Príncipe.
Conille, seleccionado por la comunidad caribeña hace solo ocho semanas, está implementando operaciones para enfrentar la crisis de violencia generada por las pandillas en el país.
La situación en Puerto Príncipe refleja los profundos desafíos que enfrenta Haití mientras lucha contra el aumento de la violencia y la inestabilidad.
En una entrevista exclusiva con Local 10 News, Conille describió los esfuerzos del gobierno haitiano para fortalecer las fuerzas policiales y el ejército, creando una estrategia unificada que involucra a todos los sectores responsables de la seguridad.
“El liderazgo del ejército y la policía están comprometidos con esta misión, pero también queremos asegurarnos de contar con un sistema de justicia funcional para procesar a los delincuentes tan pronto como sean capturados,” afirmó Conille.
El primer ministro también expresó su preocupación por el reclutamiento de niños, algunos de tan solo 12 años, en las pandillas.
“Un ejemplo claro: mientras construimos cárceles, debemos tener en cuenta la necesidad de separar a los niños de los adultos,” explicó. “Debemos ofrecer a estos niños la oportunidad de reintegrarse. Eventualmente, debemos brindarles la posibilidad de dejar las armas y reinsertarse en la sociedad.”
Conille subrayó que esto no significa que no se utilizarán todos los recursos disponibles para perseguir la justicia para las víctimas de las pandillas que han sufrido durante años.
A pesar de los desafíos, Conille se mostró optimista: “Les garantizo que lo lograremos,” dijo, reconociendo también la importancia del apoyo internacional y las alianzas.
Su objetivo es asegurar el país y celebrar elecciones en 2026, un logro que depende del compromiso continuo del pueblo haitiano y del cumplimiento de las promesas por parte de los aliados internacionales.
Conille ha pospuesto el inicio del año escolar hasta el 1 de octubre, ya que se estima que 600,000 familias han sido desplazadas por la violencia de las pandillas, con muchas escuelas sirviendo ahora como refugios.
“No tengo ninguna duda de que, si seguimos construyendo el compromiso del pueblo haitiano y nuestros socios cumplen con sus promesas y compromisos, lograremos nuestros objetivos,” afirmó Conille.
En un mensaje a la comunidad haitiana del sur de Florida, Conille los instó a mantener a Haití en los titulares, regresar para invertir y compartir su experiencia, convertirse en una fuerza política y unirse por el futuro de Haití.
Enfatizó que el éxito del país depende de estos esfuerzos y advirtió que sin ellos, el futuro de Haití está en peligro.
Mientras Conille trabaja para restaurar el orden, la paciencia entre los haitianos se está agotando, pero él sigue decidido a lograr el cambio que tanto anhelan.
Manténgase atento para más detalles de nuestra entrevista exclusiva a las 11 p.m.