NACIONES UNIDAS – La embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, viajó a Haití el lunes para reunirse con los líderes del nuevo gobierno de transición y con la policía keniana que son la avanzada de una fuerza de seguridad respaldada por la ONU dirigida a ayudar a la policía haitiana a frenar la violencia de las pandillas.
La visita de Thomas-Greenfield también pretende fomentar la adopción de medidas en relación con la crisis humanitaria de Haití y la reforma política que conduzca a la celebración de elecciones democráticas en 2026, de acuerdo con un funcionario estadounidense.
Recommended Videos
La embajadora hará dos anuncios importantes relacionados con las crisis humanitaria y de seguridad de Haití, dijo el funcionario, hablando bajo condición de anonimato antes de la visita.
Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse el 7 de julio de 2021, el poder de las pandillas ha crecido y se calcula que controlan hasta el 80% de la capital, Puerto Príncipe, y se han extendido a las zonas circundantes. El aumento de los asesinatos, las violaciones y los secuestros ha provocado un violento levantamiento de los grupos de autodefensa civiles.
El nuevo gobierno de transición dirigido por el primer ministro Garry Conille, antiguo especialista en desarrollo de la ONU que llegó al país a principios de junio, ha recibido un amplio apoyo internacional. A principios de este mes, declaró ante el Consejo de Seguridad de la ONU que la policía keniana será crucial para ayudar a controlar las bandas del país y avanzar hacia unas elecciones democráticas.
De acuerdo con las agencias de la ONU, la violencia ha desplazado a 580.000 personas, más de la mitad de ellas menores de edad, y está causando que 4 millones de personas enfrenten inseguridad alimentaria.
En señal de apoyo por parte de la misión de la ONU en Haití y la policía keniana, Thomas-Greenfield visitará el complejo donde vive la fuera policial y se reunirá con Conille, con miembros del consejo presidencial de transición y con representantes de la ONU y de la sociedad civil.
Haití solicitó una fuerza internacional para combatir a las pandillas en 2022, y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, hizo un llamamiento durante meses para que un país dirigiera la fuerza antes de que se presentaran los kenianos.