WASHINGTON – La sentencia del expresidente Donald Trump por la condena pagar por silencio está fijada para el 11 de julio, cuatro días antes de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, Wisconsin.
Después de la condena de Trump el jueves en Nueva York, el liderazgo republicano emitió declaraciones en apoyo del presunto candidato presidencial republicano del partido.
El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dijo que la condena era “guerra legal”, “la militarización” del sistema judicial y “evidencia” de que los demócratas “no se detendrán ante nada” para aplastar a sus oponentes.
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“Los demócratas aplaudieron cuando condenaron al líder del partido contrario por cargos ridículos, basados en el testimonio de un delincuente convicto e inhabilitado”, dijo Johnson sobre el exabogado de Trump, Michael Cohen. "
El gobernador Ron DeSantis, el senador Marco Rubio, el representante Mario Díaz-Balart, el senador Rick Scott y el representante Matt Gaetz estuvieron entre los republicanos de Florida que rápidamente mostraron solidaridad con Trump.
“En Estados Unidos, el Estado de derecho debe aplicarse de manera desapasionada e imparcial, no quedar cautivo de la agenda política de algún tribunal irregular”, escribió DeSantis en X.
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Rubio escribió que el veredicto era un espectáculo político que involucraba a “un juez abiertamente pro-Biden cuya hija gana dinero con el caso, un jurado del condado más liberal de Estados Unidos, cargos absurdos y ridículos e instrucciones escandalosas para el jurado”.
Scott emitió un comunicado diciendo que el caso era persecución política.
“Joe Biden y la maquinaria demócrata fabricaron un caso legal contra Trump para ganar las elecciones”, escribió Scott. “Fui a Nueva York para apoyar al presidente Trump y los votantes estadounidenses lo apoyarán este noviembre”.
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El líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Steve Scalise, acusó a los demócratas “extremistas” y “radicales” de intentar interferir en las elecciones de 2024. El gobernador Ron DeSantis también emitió una declaración de solidaridad.
El líder de la minoría del Senado, John Thune, y el presidente de la Conferencia Republicana del Senado, John Barrasso, también coincidieron en que el caso tenía motivaciones políticas.
“Cada vez más estadounidenses se dan cuenta de que no podemos sobrevivir cuatro años más de Joe Biden”, escribió Thune. “Con el presidente Trump en la Casa Blanca y una mayoría republicana en el Senado de Estados Unidos, finalmente podemos poner fin a la desastrosa agenda Biden-Schumer que está aplastando a las familias y empresas estadounidenses”.
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La presidenta de la Conferencia Republicana de la Cámara de Representantes, Elise Stefanik, emitió un comunicado diciendo que espera que un tribunal superior de Nueva York “impartirá justicia” y anulará el veredicto.
“Debemos trabajar las 24 horas del día para garantizar que el presidente Trump salga victorioso este noviembre y salvar a Estados Unidos de la fallida agenda demócrata de extrema izquierda de Biden y del uso ilegal del sistema judicial como arma contra el pueblo estadounidense”, escribió Stefanik.
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