TALLAHASSEE Fla. – Un controvertido proyecto de ley que prohibiría el aborto después de la sexta semana de embarazo ha superado otro obstáculo en la Legislatura de Florida.
Con los consabidos argumentos a favor y en contra del proyecto de ley, éste superó el martes un último comité del Senado siguiendo las líneas de los partidos, con una excepción.
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El senador republicano de primer año Alexis Calatayud, de Miami, votó en contra.
Una multitud desbordada y cinco horas de oradores tuvieron lugar en esa sala del comité, ya que la gente ha sido muy fuerte en sus convicciones sobre este tema.
“Nuestro estado está empapado de la sangre de los bebés antes de nacer”, dijo Andrew Shergel, de Florida Voice for the Unborn.
La agenda provida del estado se detalla en 11 páginas del proyecto de ley llamado “Parenting and Pregnancy Support”.
Tiene componentes precisamente para eso, pero la atención se centra en acortar el límite legal de Florida para interrumpir un embarazo a seis semanas, con excepciones para las víctimas de delitos sexuales, aunque antes de que algunas sepan que están embarazadas y mucho antes de que las pruebas intrauterinas proporcionen información sanitaria crítica.
La comisión de política fiscal del Senado planteó dudas sobre los 25 millones de dólares del proyecto de ley para las llamadas Clínicas Médicas de Ayuda al Embarazo.
Hay 98 en el estado que asesoran a las mujeres para que no aborten.
Hay preguntas sobre la rendición de cuentas, la supervisión y la falta de requisitos para la concesión de licencias.
El proyecto de ley puede ir al pleno del Senado a finales de semana, pero tiene un comité de la Cámara más para pasar. La versión de la Cámara no es idéntica a la del Senado, ya que no incluye la financiación de las clínicas. Tendrá que ser modificada para ajustarse a la versión del Senado si quiere seguir viva.