HIALEAH, Fla. – Daniel Tomayo, de tres años, se puede encontrar jugando en la acera cerca de su hogar temporal, un aula de escuela dominical en la Iglesia Rescate en Hialeah.
Su madre, Daneilis Tamayo Batista, le dijo a Local 10 News que cumple cuatro años el miércoles, y aunque no tiene dinero para hacer nada especial, dice que su regalo fue traerlo a los Estados Unidos.
Batista llegó de Cuba con sus tres hijos el mes pasado. Ellos son Daniel, Isabel Bembow Tamayo de 16 años y Delmis Tomayo de 8 años.
La vida en este momento, dice Batista, se siente tremendamente difícil.
No tiene trabajo, vivienda, familia ni dinero, pero dice que es rica en esperanza.
Eso es porque aquí en los Estados Unidos puedes tener algo que nunca obtendrías en Cuba: libertad.
Batista es uno de los migrantes cubanos récord que hacen el peligroso viaje al sur de la Florida y luchan por encontrar trabajo y vivienda asequible a su llegada.
Ayudarlos es la comunidad de fe.
El pastor administrativo de Iglesia Rescate dijo que comenzaron a recibir migrantes durante el año pasado. Lo máximo que han tenido a la vez son 29 migrantes. El martes, la iglesia albergaba a 12 personas.
“Hace un año y medio, cuando esto realmente comenzó a mejorar y antes de establecer arreglos con moteles de estadías prolongadas, teníamos algunas iglesias con personas durmiendo en sus sitios”, dijo Peter Routsis-Arroyo, Director Ejecutivo de Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Miami. “Realmente hemos podido poner en marcha un programa para evitar eso tanto como sea posible. Ese programa son los arreglos con moteles y moteles de estadías prolongadas”.
La primera prioridad es inscribir a los niños en la escuela. Buscar trabajo es un requisito para que se le otorgue refugio temporal en una de sus cuatro aulas.
Batista trabajó en un ministerio de la iglesia en Cuba. Ella está trabajando para inscribir a su hijo de 16 años en la escuela y su hija de 8 años ya ha sido inscrita.
Los líderes de la Iglesia dicen que lo que se necesita son dueños de negocios con oportunidades de trabajo y propietarios con unidades de alquiler asequibles.
“Las familias están dispuestas a patrocinar y abrir sus hogares porque ellos mismos han estado allí”, dijo Routsis-Arroyo.
En cuanto a las donaciones tangibles, necesitan colchones de aire, mantas, almohadas, toallas, productos de higiene personal y artículos de limpieza.
“La mejor manera de ayudar es ir al sitio web y hacer una donación al fondo de Asistencia a los Migrantes, que ayuda a satisfacer las necesidades a corto plazo de los migrantes, desde refugio y alimentos hasta transporte”, dijo Routsis-Arroyo. “Apoye nuestro trabajo en asistencia humanitaria y brinde ayuda a corto plazo a refugiados y migrantes en el Sur de la Florida. Nos centramos en el refugio, la comida y el transporte”.
Cualquier persona que desee ayudar también puede ponerse en contacto con Admin-iglesiarescate.org.