FORT LAUDERDALE, Fla. – Una profesora que sobrevivió a la masacre de 2018 en el instituto Marjory Stoneman Douglas fue la primera testigo de la fiscalía en el juicio para determinar la condena del tirador.
El lunes, Brittany Sinitch se sentó en una sala del tribunal del condado de Broward, en Fort Lauderdale, para hablar de la desgarradora experiencia que la dejó con un trastorno de estrés postraumático.
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“Estábamos escribiendo tarjetas de San Valentín”, dijo en la corte.
Sinitch tenía 22 años.
Acababa de empezar a dar clases en 2017 y eligió la escuela en la que se había graduado. La escuela que amaba.
Sinitch dijo que estaba en el aula 1218 enseñando inglés de primer año.
Sus alumnos habían estado estudiando “Romeo y Julieta”.
El fuerte tiroteo interrumpió su clase.
“Podías sentirlo dentro de tu cuerpo; en todo mi pecho”, dijo Sinitch. Es una sensación que regresó después de que ella saliera de la escuela.
Nikolas Cruz mató a 17 personas e hirió a otras 17.
Ninguno de sus alumnos resultó herido, pero ella siguió teniendo recuerdos.
Mientras Cruz disparaba su AR-15, un estudiante se aseguró de que la puerta estuviera cerrada, dijo.
Sus otros alumnos se pusieron bajo cubierto.
“Tenía a algunos de ellos detrás de mi escritorio”, dijo Sinitch.
Cuando el ayudante del fiscal del Estado, Mike Satz, reprodujo en voz alta su llamada al 911 en la sala, Sinitch se echó a llorar.
Para superar el trauma, Sinitch tuvo que tomarse un año de descanso.
Fundó The Unbreakable Organization, una organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es ayudar a otros a superar el trauma.