MIAMI, Fla. – Las conversaciones con un acusado de tráfico de personas grabadas en la cárcel pusieron a una mujer en apuros y con cargos.
La fiscal del estado de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle, y el jefe de policía de Miami Springs, Armando Guzmán, anunciaron el arresto de Junet Infante-Madruga, de 32 años, por su presunta participación en un intento de hacer que una víctima de tráfico de personas de 19 años cambiara las declaraciones que hizo a la policía.
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Los investigadores dijeron que también había un plan para destruir posibles pruebas electrónicas.
Los investigadores dijeron que en las conversaciones telefónicas grabadas en la cárcel por Infante-Madruga con el acusado Raúl Antonio Jiménez-Rodríguez, quien se enfrenta a múltiples cargos derivados de una detención en enero, se esbozaban formas de destruir las pruebas contra él.
Los investigadores dicen que también había instrucciones sobre cómo intimidar a la víctima para que se retractara de sus declaraciones anteriores. El plan consistía en amenazar a su familia para que cambiara sus declaraciones, según los investigadores.
El 22 de enero, Jiménez-Rodríguez y Grettel Cáceres-Crego, de 30 años, fueron detenidos en el hotel South River Suites de Medley. Ambos se enfrentan a múltiples cargos en relación con el tráfico de personas y la prostitución.