MIAMI – Elizabeth Cintra García se tomó un video antes de presentarse en una unidad militar en Cuba para cumplir con una citación. Ella tenía miedo de que la desaparecieran como castigo por participar en las protestas. Llegó a la cita pero nunca salió. Su madre, Maidelki García Guzmán, la esperaba angustiada. Cuando fue a averiguar dónde la retenían, se enteró que está en una prisión de mujeres en Santa Clara.
Sin acceso inicial a un abogado defensor, un juez la acusó de falta de respeto a las autoridades, propagación de epidemia, trastorno público, e incidir otros a protestar. La organización Human Rights Watch estima que unas 500 personas fueron arrestadas durante las protestas. Cubalex, una organización defensora de derechos humanos, reporta que hay más de 600.
Varios abogados de derechos humanos están indignados. El gobierno cubano está utilizando pruebas resumidas, procedimientos rápidos con poca documentación y todo sin darle la capacidad al acusado para demostrar su inocencia. Cintra García teme que su hija de 20 años, quien no cometió vandalismo, no sabra como enfrentar los peligros de estar tras las rejas.
“No tengo palabras que expresen mi dolor,” dijo García Guzmán.
Con cubanos como ella en mente, el presidente Joe Biden no solo no dará marcha atrás a las más de 200 sanciones del expresidente Donald Trump contra el gobierno cubano, sino que también planea responsabilizar a cada individuo que viole los derechos humanos en la isla.
En respuesta a la represión de las protestas SOS Cuba, su administración sancionó al general de Cuerpo del Ejército Álvaro López Miera, el ministro de defensa cubano de 77 años quien es sumamente leal a Raúl Castro y que ha estado en el círculo íntimo del poder durante décadas.
Parte de las sanciones de Biden contra La Brigada Especial Nacional del Ministerio del Interior, también conocida como SNB, y a el Ministerio del Interior de Cuba, o MININT, estaban vigentes desde enero, cuando la administración de Trump pasó varias sanciones de última hora.
El SNB y sus “Boinas Negras”, una unidad de fuerzas especiales dependiente del MININT, participaron en allanamientos domiciliarios para realizar detenciones arbitrarias, según activistas de la isla que compartieron fotografías e imágenes. En un caso, en la ciudad cubana de Cárdenas, varios testigos dijeron que dejaron un charco de sangre en una sala de estar y una familia asustada que creía que su pariente estaba muerto.
“El pueblo cubano está protestando por los derechos fundamentales y universales que merecen de su gobierno”, dijo Janet L. Yellen, la secretaria del Departamento de Tesorería de EE. UU.
La posición de la administración Biden es que el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba, o MINFAR, liderado por López Miera, ha jugado un papel integral en la represión y ha causado “graves abusos a los derechos humanos”.
Biden asegura que este es “solo el comienzo” de su política. La respuesta de Biden también incluye revisar la política de remesas, implementar nuevas medidas para mejorar el acceso a internet en la isla y aumentar la capacidad de servicios consulares en La Habana. El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo que el personal de la embajada servirá para tambien mejorar la actividad diplomática.
“Todo lo cual estará al servicio de ayudar al pueblo cubano“, Price dijo.
Para Manolo Reyes, un comisionado Cubano Americano de la ciudad de Miami, dijo que estas medidas no son suficientes para el gobierno Cubano.
“Allí no hay negociación, ni vergüenza”, Reyes dijo en inglés. “Y haciendo una declaración tratando de avergonzar a un general, no se puede avergonzar a alguien que no tiene vergüenza.”
Cobertura completa
Video del reportaje vespertino en inglés
Video del reportaje vespertino en inglés
Video muestra Boinas Negras en acción (inglés)
Video de informe de la tarde (en inglés)
Local 10 News productora ejecutiva Natalie Morera de Varona y productora Michelle Lacamoire contribuyeron a este informe