NEW YORK – Una severa tormenta invernal azotó el lunes el noreste de Estados Unidos pero, en esta era de pandemia, las clases no se vieron afectadas sino la campaña de vacunación contra el coronavirus, ya que muchos sitios tuvieron que cerrar por el clima inclemente.
La tormenta avanza por el noreste del país, pero “lo hará muy lentamente” y causará fuertes vientos y densas nevadas, estimó Lara Pagano, meteoróloga del Servicio Nacional de Meteorología. “Será un fenómeno prolongado”, pronosticó.
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Para la mañana del lunes varias zonas ya habían recibido entre 7 y 12 centímetros (entre 3 y 5 pulgadas) de nieve y 15 centímetros (6 pulgadas) cayeron en partes de Pensilvania. En partes de Nueva Jersey, cayeron 17 centímetros (7 pulgadas).
Las clases presenciales fueron canceladas y muchos centros de vacunación cerraron. El alcalde de la ciudad de Nueva York Bill de Blasio, en declaraciones a la emisora MSNBC, expresó esperanzas de que los centros de vacunación reabran el martes.
El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, declaró el domingo estado de emergencia y ordenó cerrar todas las dependencias públicas a excepción de las esenciales.
Miles de vuelos fueron cancelados en toda la región. En el Aeropuerto LaGuardia de Nueva York, el 81% de los vuelos quedaron cancelados y en el de Newark fueron el 75%.
Amtrak canceló su servicio de trenes Acela entre Boston y Washington, y el servicio Pennsylvanian hizo lo mismo con sus rutas entre Nueva York y Pittsburgh.
Todos los trenes y autobuses de Nueva Jersey suspendieron servicio a excepción de la Atlantic City Rail Line. Otras rutas operaban a medias, como Northeast Regional, Keystone Service y Empire Service. Los ferris de New York Waterway suspendieron sus servicios.
Hace pocos días hubo una tormenta invernal que cubrió de nieve al centro-norte del país. También hubo nevadas en Ohio, Washington DC y Virginia.
La tormenta obligó al presidente Joe Biden a suspender una visita a la sede del Departamento de Estado el lunes. La visita se dará más tarde en la semana cuando los empleados del departamento puedan acudir a la oficina, informó un funcionario de la Casa Blanca.